La Jara pringosa (Cistus ladanifer)

 
Flor de Jara (Senderismo Los Vettones)

Flor de Jara (Senderismo Los Vettones)

En los montes que rodean Madrigal de la Vera podemos disfrutar, sobre todo en los meses de Abril, Mayo y Junio, del espectáculo de la flor de la jara y del olor intenso del ládano.

Se llama jara o estepa a diversas plantas, casi siempre del género Cistus. Forman parte importantísima (cuando no exclusiva) de los matorrales mediterráneos y algunas son especies pioneras en la recuperación de suelos degradados, especialmente tras los incendios forestales. De hecho su expansión se ve favorecida por ellos; son especies pirótifas (ayudadas por el fuego sus semillas se abren y germinan antes).

Es una planta (arbusto leñoso) de hoja perenne muy presentes en el sotobosque mediterráneo. Suelen formar masas compactas que cubren totalmente el territorio en que habitan, formando un matorral espeso por lo que los caminos poco transitados quedan cerrados por ellas. Crecen en suelos ácidos (graníticos, pizarrosos) pero casi nunca calizos. Las flores son regulares, hermafroditas (ambos sexos) y con cinco grandes pétalos a menudo arrugados que caen fácilmente de la flor, de hecho no es difícil ver pétalos en el suelo y capullos aún sin floración. Sus numerosos estambres producen gran cantidad de rico polen que atrae a muchos insectos, como las abejas que producen nuestra riquísima miel de jara.

Sus frutos son cápsulas formadas por 5 ó 10 hojas carpelares, que se abren a la madurez en 5 ó 10 cavidades con numerosas semillas. La madera de Cistus ladanifer, por ser durísima se usa en la fabricación de pequeñas herramientas o piezas que vayan a sufrir gran rozamiento, y también como excelente leña.

Flor de Jara (Marisol)

Flor de Jara (Marisol)

Llega hasta los 2,5 m de altura, y sus hojas, alargadas y estrechas están abundantemente impregnadas de una sustancia pegajosa, el ládano, resina fuertemente olorosa, que les da un aspecto brillante y se adhiere fácilmente a las manos y ropa.  El aceite de ládano es de esencia, de color amarillo dorado y con olor a ámbar gris; soluble en alcohol y éter, se emplea en perfumes aunque actualmente está en desuso, se empleaba en aliviar la tos.

Sus flores son muy grandes (10 cm) y con cinco pétalos blancos que, en la variedad maculatus, presentan una mancha púrpura en la base. Es la especie más frecuente en la región mediterránea occidental, donde su área coincide en líneas generales con la de la encina. Al aumentar la altura, cuando la encina es sustituida por el rebollo, la jara común es desplazada por otra muy parecida,  la jara o estepa de montaña que es más pequeño que el anterior, vive a mayor altitud y se distingue de él, aparte de por su tamaño, por las hojas más anchas y onduladas como las del laurel y menos pringosas y olorosas, además sus flores son más pequeñas y tienen en sus pétalos blancos una mancha amarilla.

En nuestro entorno podemos disfrutar de ellas en casi cualquier parte de monte (por ejemplo, en la Umbría de Helechoso o  Jelechoso) y os recomendamos las rutas de Helechoso Romartín para pasear disfrutando del olor que desprenden.

 

Campo de Jara

Campo de Jara

Jaras y Gredos

Jaras y Gredos

 Posted by at 11:28 AM

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